martes, 31 de agosto de 2010

Una mirada a Budapest (Agosto de 2010)


Mis impresiones de Budapest, del 8 al 20 de agosto de 2010
Escribo en teclado para idioma húngaro…
Querria ir mas alla de la primera impresion de esta bellisima ciudad y de los tipicos itinerarios que aconsejan las guias para turistas. Se que me quedo corta, muy corta; pero esta experiencia me deja la inquietud de leer y profundizar sobre lo que he visto, oido e intuido.
Echo de menos la vida en periodo de trabajo porque permitiria hacerme mas cargo de la marcha de la ciudad. Estamos en Agosto, por tanto habra mucha gente de vacaciones, y en los puntos fuertes de la ciudad se ven muchos turistas, muchos menos que en Paris y Viena, por ejemplo. Circulan pocos coches. El transporte publico es fluido y eficaz
El idioma encierra el gran secreto de este pueblo, es una puerta que no puedo abrir porque suena muy distinto al espanol, o lo poco que conozco del ingles, italiano, frances… Se que es una tierra de poetas, escritores, quizas se deba a la sensibilidad de sus almas y al orgullo de su lengua, se nota que la aman por la cadencia de sus palabras, por el sentimiento que transmiten sus canciones.
Budapest esta partida por el Danubio, como la mirada de este pueblo, dividida entre Oriente y Occidente. De los Urales proceden sus origenes, los Magiares. Los turcos dejaron huella, que intento encontrar en manifestaciones de Arte oriental. Por ahora solamente he encontrado lo que ensena el Museo de Historia Magiar y el arte de origen Serbio en iglesias ortodoxas, sigo investigando…
Veo con mas claridad su mirada a, su ser… Europa, que les aporta un gran esplendor: en Arquitectura, los edificios de las zonas mas nobles son majestuosos, solidos, gritan que fueron parte de un Imperio muy poderoso. En la Pintura y escultura he disfrutado con el encuentro de artistas, desconocidos para mi, que trabajaron en dialogo con las vanguardias europeas de fines del XIX y XX. Me he conmovido con el impresionismo, expresionismo, cubismo… de pintores hungaros. Los Museos, repletos de tesoros, dejan ver un parentesis demasiado largo de descuido (deterioro, falta de limpieza) y tienen unas guardianas, la mayoria en edad de estar jubiladas, que siguen con la mirada, y fisicamente…, al visitante; no parecen confiar demasiado. Lo he entendido cuando me han dicho que el sueldo de estas personas es de 100 euros al mes
De ese parentesis quiero decir algo. De Oriente (Rusia) les llego tambien la desgracia con la invasion Comunista. Seguramente el pais se va recuperando de la falta de libertad. Lo que puedo contar hoy es que veo una ciudad empobrecida, hay demasiadas personas que no consiguen subirse al tren de la economia actual. Me dicen que es bastante comun tener un sueldo de 300 euros y los precios no son muy distintos a los del resto de Europa. Nunca he visto tantos pordioseros en una ciudad europea; estan en todas partes. Es habitual encontrarlos en el tranvia, pero los demas no se apartan ni miran a otro lado, son uno mas…, todo el mundo parece comprenderles. Muchos son ancianos, es una estampa habitual ver viejecitas que se pasan el dia de pie en una esquina, en las escaleras de los tuneles del metro, ofreciendo pequenos ramilletes de flores a quien quiera comprarlos. La gente de la calle, la que te cruzas, va vestida como puede, muy sencillamente, aqui no parecen afectados por la plaga de las marcas y no da la impresion de que puedan perder el tiempo en esas superficialidades. Sobre todo muchas personas mayores y de mediana edad van cargados de bolsas de plastico, viejas…, muy pesadas, no son bolsas bonitas, parecen ir con la casa a cuestas, incluso he visto, por la fuerza de la costumbre quizas, llevar maletas de ruedas a pulso; veo en esto la imagen de un pueblo fuerte, acostumbrado a sus cargas y sufrimiento, lo llevan en silencio. En sus miradas, de ojos claros, algo rasgados, hay cierta arrogancia, dureza y seriedad, parecen ventanas de vidas dificiles.
Gran parte de los edificios estan desconchados y ennegrecidos, el tranvia y los autobuses huelen mal, estan viejos, excepto algunos de las zonas nobles que han renovado y tienen aire acondicionado -son las zonas turisticas-. Pero te llevan a todas partes con rapidez, son una red en continuo movimiento, entre gente y bicicletas, que atraviesa toda la ciudad. Tienen, como en todas partes, senales de vandalismo (pintadas en los medios de transporte y paredes de subterraneos y estaciones), con las que no tienen medios para luchar. Tampoco se ven ejercitos de limpieza de la ciudad, pero demuestran su grado de cultura en que no hay papeles ni desperdicios fuera de las papeleras, ni aceras plagadas de manchas negras de chicles tirados sin mirar donde.
El pueblo hungaro es realmente culto: el entretenimiento nacional es la lectura y el ajedrez y parece que todos tocan algun instrumento musical. Tienen facilidad para los idiomas, no me extrana despues de oir la dificultad de su lengua. Tambien he comprobado la excelencia de espiritu que tienen en su modo de vivir la Liturgia; he asistido a la Misa en el templo de Matias y en San Esteban y ademas de la grandiosidad de las dos iglesias, el cuidado del culto y los cantos ayudan a trascender y vivir el Misterio… He visto dos manifestaciones de lo respetuosos que son, que me han impresionado: En el Parlamento se puede ver colgada la bandera hungara con un gran agujero, el que ha quedado al recortar la hoz y el martillo comunistas. Existe un parque en las afueras de Budapest (Memento Park), donde han colocado todas las estatuas de la etapa comunista; no las han roto, ni arrumbado en almacenes, estan a la vista de quien quiera visitarlo.
Del mundo de las aguas termales no puedo decir nada por hoy. Se que para ellos es muy importante y lo valoran mucho.
Alguien preguntaba si habia encontrado el alma hungara; he pensado en tres lugares: La plaza Ferenc Liszt, por el ambiente y por lo que significa este pianista y compositor hungaro, fue un genio de la interpretacion, por su tecnica y por el sentimiento que ponia y transmitia, aporto a la Musica el POEMA SINFONICO; veo en el la inmensa fuerza del espiritu hungaro, no tanto para innovar como para asimilar, VIVIR y comunicar.
Otro lugar en el que he intuido el alma hungara es el Museo de Ceramica de Margit Korvacs, en Szentendre. Su obra artistica sabe ser lo que hay que ser en cada momento: un susurro, un grito, una caricia, suave brisa….
El tercer descubrimiento es el Museo Víctor Vasarely las plazas del entorno; es un lugar retirado, donde encontrar el alma hungara…
Budapest, Agosto de 2010
Macu Cuesta